domingo, 18 de septiembre de 2011

Desvaneciendo Maravillas

Continuamente le recrimino no haber apreciado la belleza del mundo. Actos condenadamente estúpidos e innecesarios cometidos debido a la falta de visión. La naturaleza es hermosa. El hombre es destructor, mas también puede ser el creador de las maravillas más destacables.

¿Por qué no observar eternamente las sombras creadas por los majestuosos árboles? ¿Por qué no escuchar el arrullo incesante del mar?

Porque hoy no es suficiente.

No es que la belleza se hubiera ido, sino que no era capaz de disfrutarla. Tan insípida era aquella existencia que no pudo con ella. Y hoy lo entiendo.

Cuando el alma dice Basta

A veces creo que lo entiendo.
Su partida me ha hecho reflexionar sobre tantas cosas que preferiría no haber pensado nunca. Desearía poder dejar de pensar. De verdad. La capacidad de análisis ya no es un don, sino un castigo. Es una eterna burla a mi maltrecha mente, y simplemente ya no puedo soportarlo.
Necesito desenchufarme de mi cuerpo y mi alma. De la vida. Preciso un instante de inexistencia.
¿Sería eso lo que él tanto buscaba? ¿Ser libre de sí mismo?

sábado, 17 de septiembre de 2011

Timeless

Los días tienen cada vez menos horas, o yo cada vez vivo menos...

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Lo Insípido.

Dejando de lado las miserias e injusticias de la vida, el mundo es hermoso. Hay mil cosas que ver, hacer, sentir, experimentar.
Aún así, es tal la apatía que hoy me embarga que temo estar perdiendo la capacidad del asombro y la gracia.
Lo estético no es profundo, lo profundo no genera motivación, y la motivación brilla por su ausencia.
Un ser enajenado, desencantado. Frustrado por sus propias incapacidades, pero desatendido de cualquier grado de convicción por cambiar aquel estado. Resignado a su inevitable desinterés, retroalimentando su pereza o, lo que es peor, sepultando su último ápice de voluntad.

domingo, 11 de septiembre de 2011

It's all about -what

Life will make you understand, it's not about who you want to be, it's all about who you really are.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Latidos: Estableciendo Realidades

Latidos. Acompasados, irregulares, cansados, agitados.

Latidos.

Hoy no alcanzan. No hacen más que burlarse de mí.

Porque no generan la sensación que deberían. Porque aquel fenómeno es ya demasiado ajeno a mí como para ser real, y mis sentidos están hastiados de tanta hipocresía.

La que más perturba es, paradójicamente, la que reina en mi interior.

¿Cómo admitir que el conjunto de las más despreciables actitudes están impregnadas en mi ser? ¿Cómo reconocer que soy todo aquello que tildo bajo los calificativos de patético, insulso y estúpido?

Latidos. Existen para recordarme la ironía de mi insignificancia. Creadores de falsas promesas e ilusiones.

Releo, y todo lo anterior es palabrerío. Esto también lo es. Porque no hay palabras salidas de esta mente que valgan la pena leer. No hay elaboración y pensamiento digno de apreciación, y no son más que intentos fallidos de conceptos que jamás serán.

Porque la victimización y la ironía continua enloquecen, agravándose con cada letra.

Un blog embebido en cavilaciones de alguien que no tiene más que hacer que sentarse a pensar en lo miserable que es, aún teniendo un cielo azul tras la ventana. Que sufre con sus placeres, y se desvive por la poca importancia que percibe en todo aquello que le rodea.

Que se odia por caer en estereotipos.

Que simplemente se odia.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

La Espera

Absorto en sus pensamientos, no pudo evitar sobresaltarse cuando una inesperada voz interrumpió su silencio.
Levantó la mirada, mas no podía descifrar lo que escuchaba. Un zumbido de incoherencias que parecían desvanecerse apenas ser pronunciadas. Su mente aún estaba en otra parte.
Ajena a su incomprensión, la voz continuaba ahí, cada vez más insistente.

Llevo aquí esperando más de treinta minutos, murmuró. Pero tiene que venir. Va a venir.

Sin realmente estar de acuerdo con sus palabras, se limitó a acomodarse mejor en el asiento, dispuesto a esperar una vida si fuese necesario.
Inconscientemente, pareció haber aplacado a la molesta voz, lo que le permitió retomar correctamente el hilo de sus pensamientos.
Sin embargo, sabía que no debía hacerlo. Lo único que lograba era ahondar la herida que latía al compás de su corazón. Debía deshacerse de aquellas vanas ilusiones. Pero ya no le era posible. Habían llegado al límite.
Los más turbulentos y hermosos meses de su vida… Bien sabía que era hipócrita decir que preferiría no haberlo conocido. Agradecía día a día haberse cruzado en su camino.
No es que le molestara ser dependiente, sino que le asustaba la imagen de una eterna abstinencia. Porque no era correspondido. O al menos no abiertamente. Porque aquella era la última oportunidad de tomar cartas en el asunto, y parecían estar desbaratándose a una velocidad impresionante.
Y no podía permitirlo, pero tampoco evitarlo. Él había seguido su voluntad. Había cometido la insensatez de escuchar a su corazón por sobre su mente, y aquí estaba hoy.

La gente danzaba de un lado a otro, susurros iban y venían, y él permanecía inmóvil, a la espera de lo imposible. Porque, realmente, era imposible.
¿Quién tiraría un collar de diamantes sólo porque un eslabón estaba dañado? Sólo era cuestión de desechar aquella imperfección y volver a la normalidad.


Esperó veinte minutos. Y luego otros diez. Y cinco más…. Sólo un poco más.

No vino. La realidad de aquella afirmación hizo que su corazón se empequeñeciera tanto que el dolor se volvió insoportable. Respirando con dificultad, dejó dinero sobre la mesa, tomó su bolso y abandonó aquel triste lugar.
Eso era todo. Era hora de irse. Ya nada lo retenía.
La sola presencia de Él hubiese sido suficiente para abandonar todos sus planes… mas era evidente que allí no había quien añorara su estadía. Comprendió entonces lo solo que estaba en el mundo.
El joven no estaba seguro de que estuviera lloviendo, mas cientos de gotas de agua repiqueteaban en su rostro. Solo. Estoy completamente solo.
Comenzó entonces a reírse a costa de su propia ingenuidad.

Y alguien rió con él.
Se detuvo y alzó la vista.
No era posible… ¿o sí?
Pero sí que lo era. Porque allí estaba, parado frente a Él. La dicha que lo invadió mientras fusionaba su cuerpo con el de su amado en un abrazo era indescriptible.
El recién llegado no hablaba. Él tampoco lo hacía. Pero no se necesitaban palabras. Estaba allí, y era todo lo que importaba.

Incluso si todos los espectadores que allí estaban veían a un hombre solo raramente abrazado a un poste de luz, no importaba.

Porque a veces el engaño hace bien al alma.

Porque la felicidad no precisa ser racional.

martes, 6 de septiembre de 2011

So disenchanted

I keep on fooling myself.
I'm just tired of pretending I'll suddenly care...In the end, I feel everything is meaningless.
I mean, what's the point of working my buns to the bones in order to achieve -or not- something I only believe I want.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Astronaut -SP

So tonight I'm calling all astronauts. Calling lonely people that the world forgot.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Liar Liar

OH! You're such a Wonderful liar...

And so am I.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Número 18

Cuando cumplí los 17 años no le di importancia. Afirmé que esas fechas carecen de sentido.
Hoy, cuando puedo palpar la ráfaga de los 18, me retracto. Condicionada por la sociedad, 18 ya no es un número. Es una etiqueta. Una carga. Una puerta que abre posibilidades, mas que atormenta con sus responsabilidades.
Hoy, que proclamo ser madura y consciente, no quiero abandonar el umbral protector de mis 17 años. Estúpido o no, siento la puerta cerrarse a mis espaldas... o al menos su eco, si es que ya se había cerrado previamente.
Qué paradoja es que te consideren "intelectualmente madura" cuando todo lo que ansío es echar formol a mi vida. Permanecer en este momento sólo un rato más.
Porque reniego, insulto, me quejo... pero aún así lo disfruto.
No tengo la necesidad o añoranza de crecer. Al contrario, la incertidumbre parece ser un motor en reversa, y sólo está logrando una involución generalizada en mi cabeza.
Admito únicamente para mis adentros -y ahora por escrito- lo que no me atrevo a decir en voz alta. Porque sería demasiado real.

Así, parece que estando en el auge de la vida, las emociones, las vivencias y la juventud... todo se desmorona. Porque en el fondo sólo soy una persona que teme a lo desconocido. O a lo demasiado conocido. A tener la certeza de que todo irá mal. De saber cuánto hay por perder incluso cuando no haya algo por ganar.
Si es una versión pesimista de la existencia, y probablemente lo sea, no tengo más remedio que aceptar que es lo que pienso. Sin mentiras ni disfraces.
Un náufrago que ya ha perdido toda esperanza de tocar tierra.
Un soldado que ha ganado la guerra, mas ha perdido a todos sus compañeros en combate.
Una hormiga que ha trabajado toda su vida por instinto, mas cuyo fin desconoce.

Un ser humano que ya no desea interpretar su papel.

Seven Pounds [...]

-What's your emergency?
-There's been a suicide.
-Who's the victim?
-...I am.

Cavilaciones [2]

He llegado a la conclusión de que el 85% de los males que me acometen no son más que meras creaciones de mi retorcida y neurótica mente.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Dead or Alive

Nowadays I just feel too dead to be alive.