Lo bueno de ser un inútil, es que la gente jamás tendrá grandes expectativas para con nosotros. Si, por el contrario, nos referimos a un ser de intelecto, responsable, interesado, dicha persona se verá constantemente bajo la presión de aquellos que tienen su mirada fija en él... y esta en su naturaleza el, consciente o inconscientemente, no defraudar y cumplir con lo que se espera de su persona.
Entonces ¿Por qué no ser simplemente alguien estúpido e incípido? Alguien que cuando, por razones divinas, tenga la elocuencia de algo brillante, causará sorpresa, pero a su vez admiración y consentimiento.
Quienes son considerados capaces, están bajo una constante prueba y, en caso de equivocarse, los testigos se encargarán de hacérselo notar, recordárselo e incluso criticarle por su fallo. Ahora ¿Qué sucedió con todas esas sabias actitudes e ideas que tenía aquel ser? Han sido reducidas, olvidadas, ¿Por qué? porque un único error por su parte vale más que todos sus aciertos, así como una eventual observación proveniente de un ignorante valdrá más que todas sus idioteces previas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario