cuando la vida diga que es hora de tomar mis cosas y comenzar a caminar lejos de aquí, me despediré. Te buscaré en todos los lugares en dónde sé que no estás y luego, finalmente, iré a dónde estés.
Sé que no te importará mucho que me vaya, así que seré breve.
Un abrazo. Una sonrisa. Buena suerte y adiós.
Y entonces seguiré mi camino, para luego establecerme y ser feliz. Me daré cuenta que lo he superado, que te recuerdo pero no te extraño, que te quiero pero no te necesito.. y te escribiré una carta, algo muy simple...
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